jueves, 26 de abril de 2012

Milagro catastrófico...

“Búscame en el infinito y convierte las estrellas en milagros”

Y me refiero a esa relación que todos queremos pero ¿qué ocurre si parece que el tenerla con quien realmente queremos resulta o se vislumbra imposible?

La convivencia ideal en la que no paras de reír, la complicidad que sientes y se refleja en un cuidado mutuo, el saber que le pasa a la otra persona con tan solo una mirada, el escuchar su respiración o quizás a través del tiempo y espacio presentir y sentir lo que le pasa; pláticas que duran horas mientras el entorno deja de importar, la música funge como un complemento en esa maravillosa e inesperada cena, la ropa es lo de menos ya que el ser uno mismo sin máscaras, sin ocultar el más mínimo detalle físico e interno; la aventura que no sabes a donde te llevará, tomar la camioneta sin rumbo alguno, un día sin planear pero que te llena de gozo y satisfacción al pasarla con él porque no importa el qué si no con quién ya que siempre la pasas bien; qué decir de los momentos de pasión arrebatada, una suave caricia coqueta que puede ser el preámbulo de una gran momento de sexo que termine en un abrazo después de haberse entregado… mejor aún si pudieses despertar cada día a su lado, que fuera él lo último que vieras cada día y lo primero también, así si la vida no te regala un día más habrá sido maravillosa esa ultima mirada al ser amado… un amigo, un amante, un compañero, un consejero… él.

Todo suena maravilloso y es lo que yo creo que todos queremos pero nada es perfecto, también existe el conflicto, el no siempre entenderse lo cual lleva a discusiones, quizás a veces los celos son un gran enemigo, a veces las diferencias de personalidad que a veces nos acercan otras nos alejan, tal vez las mismas similitudes nos pueden confundir, un día pesado de trabajo, una mala noche y todo puede derrumbarse.

Haciendo malabares entre lo bueno y lo malo pasa el tiempo y esa relación que creías imposible por todas las dificultades que aparentemente existen, llega convirtiéndose en un milagro catastrófico.

Yo me aferro a que me llegará el mío, no suelto esa ilusión y mientras tanto, dedico esta entrada a una gran amiga a la cual su milagro catastrófico la encontró el día de hoy.

lunes, 16 de abril de 2012

Indigno de un futuro mejor

Las últimas semanas han estado algo… bueno muy pesadas en el trabajo y todo debido a que he tenido que capacitar a nuevas personas que entrarán a formar parte del equipo de inversiones, las experiencias vividas son el origen de le reflexión que les presento en la entrada de hoy.

Como ustedes ya saben, pero por si no me han leído se los vuelvo a contar en resumen, a partir de febrero viví un cambio laboral para incorporarme justamente al equipo de inversiones, derivados y cambios en la misma institución donde ya trabajaba; digamos que ha sido una experiencia enriquecedora, muy pesada pero gratificante. La sorpresa viene cuando a pesar de ser el miembro más nuevo del equipo, fue elegido tácitamente para capacitar a los que serían mis nuevos compañeros y que estarán para apoyarme junto con el resto de los otros asesores que ya estaban; debo confesar que de entrada no me hizo mucha gracia ser yo el responsable de su capacitación ya que consideraba que al ser el miembro de más reciente integración, yo aún debería estar en posición de solicitar asesoría en algunos casos sin embrago, al pensar un poco la operativa que manejo, les digo y si con orgullo que he estado involucrado en operaciones que anteriormente no se realizaban en mi área y que quizás por esto la tarea de capacitación de estos dos jóvenes está en mis manos.

Pero ahora comencemos a hablar de los capacitados y los resultados obtenido que a mi parecer son preocupante y un foco rojo en mis contemporáneos (quizás no todos pero si podría decir que muchos dadas otras experiencias que me han compartido). La semana antepasada llega un joven de 28 años que buscaba una oportunidad en inversiones, anteriormente se encontraba en otra institución financiera pero distinta área y ante la negativa que recibió al solicitar su cambio, fue que decidió buscar una oportunidad y así fue como se incorporaba a mi equipo. Desde el inicio algo me decía que muy probablemente no sería la persona indicada para el trabajo y que tampoco duraría mucho y, así fue… el motivo: es que yo pensaba que el trabajo estaba más cerca de mi casa y no estoy dispuesto a trasladarme tanto tiempo / distancia, la verdad es que de Desierto de los Leones a San Ángel no creo que esté muy retirado ni se haga tanto tiempo, vamos yo estuve casi dos años moviéndome de San Ángel a Santa Fe y busqué alternativas para evitar el tráfico como ir al gimnasio en las mañanas, pero este querubín tampoco quería despertarse temprano, así que tras recibir la confirmación de su asignación al sur de la ciudad, decidió renunciar y muy casual me lo topo al día siguiente en el gimnasio muy quitado de la pena y sin preocupación alguna, cosa que me parece completamente contradictoria con sus quejas durante las pláticas que tuvimos en donde decía que hay pocas oportunidades laborales, que le gustaría estar en un estatus superior, ganar más… en fin, ahora que lo tenía no estaba dispuesto a esforzarse, ahora que tampoco me agobia mucho por el ya que me rehúso a tener en mi equipo a alguien con tan poca fuerza y empuje; pienso yo que si lo que quería es un trabajo en el cual poder llegar a las 10:00, salir a comer de 14:00 a 16:30 y retirarse a las 18:00, sería más conveniente pensar en otra opción como rentar algún local cerca de su casa y poner una tiendita así como muchos de nosotros lo hicimos en la comodidad de nuestro hogar cuando niños, no vaya a ser que el joven se vaya a desgastar por empeñarse, aunque pensándolo bien seguro hasta este negocio no le resultaría ya que para ser dueño y jefe de uno mismo (así sea de algo sencillo) se requiere voluntad, esfuerzo y perseverancia, cualidades que este chico no mostró. Espero le vaya bien y pues que su familia lo siga manteniendo pues no se le veían los ánimos por superarse… eso si, ojalá no le vuelva a quitar el tiempo a personas que si trabajamos y que si de algo escaseamos es precisamente de tiempo.

Por otra parte, una gran chica proveniente de España que debido a la crisis en aquel país, fue necesario que su esposo viniera e México para conservar el trabajo aunque esto implicara un ligero retroceso en la carrera laboral de ella; sin embrago, aquí es en donde se demuestran las ganas de salir adelante, estar consciente de que en ocasiones de requiere un sacrificio pero que con la actitud correcta y esforzándose es muy probable la consecución de las metas que nos pongamos. Pues yo muy contento con ella, considero será un gran elemento para el equipo, me ha preguntado de todo, se preocupa por ir más allá, no tiene miedo a equivocarse y pedir ayuda aunque no por eso es despreocupada o poco precavida.

¿Será acaso que tenemos que vivir alguna situación crítica para valorar lo que tenemos y estar dispuestos a dar más en el presente a cambio de obtener lo que buscamos en el futuro? O quizás esta forma de pensar sólo logramos desarrollarla algunos poco; lo que sí se es que me aflige ver como muchas personas de mi generación y contiguas toman tan a la ligera su futuro económico y profesional cuando vivimos en una época que si algo no tiene es estabilidad financiera a mediano y largo plazo y que definitivamente no han crecido con esta idea de que el trabajo dignifica al hombre, pero que también para ser digno de una buena oportunidad laboral hay que romperse la madre todos los día.

Para finalizar creo que es muy cierto lo que se dice: “cada quien tiene lo que se merece” y pues es triste ver que las generaciones venideras recibirán un México deteriorado, pero más triste ver que no tienen lo que hace falta para sacarlo adelante.

jueves, 12 de abril de 2012

Vivir y entender un sentimiento

Pues hoy es uno de esos días en los que te caen los veintes, y no me refiero al cumpleaños 20 puesto que esta ya pasó hace unos poco años, me refiero a esas netas que te llegan el día menos pensado, en un lugar inesperado, compartiendo alimentos con un amigo o quizás tomando un café solo sin realmente estar reflexionando y, que así como por arte de magia, obra del espíritu santo, arte vudú o vayan ustedes a saber, llega ese pensamiento mezclado con un sentimiento del cual no había deparado en analizar para conocer como es que ha cambiado con el paso del tiempo.

Y es así como el sentimiento que muchos juramos vivir pero que pocos logran entender… bueno, creo que hoy es el día en que me uno al segundo grupo, al que lo vive y lo entiende. A lo que me refiero con esto es que muchas veces cuando decimos o “realmente” amamos a alguien es con la condición de si está con nosotros, pues bien, creo que esto es no entender para nada el sentimiento del amor.

Cuando amamos a alguien desinteresadamente lo que queremos es su bienestar, desarrollo personal, el poder ver que se libere de las cadenas del pasado y no precisamente para estar con uno sino para poder abrazar su presente y trabajar libre en su futuro, no importa si en este nos encontraremos nosotros de una u otra forma, pero ¿qué pasa cuando crees que no ha logrado avanzar? ¿cuando puedes percibir que se encuentra atrapado en un momento de su vida? ¿qué hacer? La verdad es algo muy difícil ya que no puedes invadir y meterte de esa forma en la vida de nadie, menos en tu papel al ser alguien que ama a esa persona y que tus intenciones se podrían confundir con interés personal aunque ya te encuentres en el conjunto de personas que realmente han logrado entender el amor como tal, un sentimiento desinteresado que procura el bienestar del otro sin condición ni límites; todo se complica cuando sabes que además pones en riesgo otras relaciones que quizás no entenderían tu postura, serías juzgado como un manipulador que busca su propia conveniencia… pero que hacer si por dentro te sientes desagarrar al encontrarte entre la espada y la pared al saber que quizás podrías hacer algo por mejorar la situación pero tal vez no es tu papel y no lo entenderían.

Una vez entendido el amor creo que lo siguiente a comprender es la confianza mientras desarrollamos la fe, esperando que las cosas evolucionen, sabiendo que si llegan a necesitar de una muleta, un hombro, una oreja, un ala… ahí estarás tú (siempre y cuando lo permitan, porque aquí no se trata de obligar a nada a nadie) y poder ver al ser amado libre de toda atadura y avanzar, quizás en una sendero distinto al tuyo pero al final no importa, porque lo único importante es saber que ahora está bien y eso es suficiente cuando se ama, dejar libre a esa persona para que pueda vivir y no lastimarlo de una u otra forma por amarlo, eso es lo que vale en esto del amor.

miércoles, 11 de abril de 2012

E poi... e poi vivere.

El día de hoy, después de haber hablado contigo ayer y reflexionado durante el camino esta mañana hacia el trabajo, es que me doy cuenta como poco a poco me fui abandonando, perdí las ilusiones, dejé a un lado mis convicciones, quizás hasta llegue a traicionar mis ideales y, mientras todo esto sucedía, muy posiblemente me aparté y lastimé a quien no debía.

Confieso que llevo un mes o más sin ir al gimnasio, semanas sin llevar un régimen alimenticio saludable, días sin ponerme una sola crema, horas sin meditar, minutos sin ser yo mismo… si, todo suena a que poco a poco me fui dejando caer en una depresión. Pero ¿cómo seguir adelante cuando te das cuenta que aquello que tanto añoras no es? Que has vivido en un mundo inventado en tu cabeza para evadir la realidad, que has dejado pasar el tren de la vida y con ello la oportunidad de conocer maravillosos pasajeros, que muchas veces no importa que tanto te esfuerces las cosas no serán como quieres y otras veces que no te has esforzado lo suficiente en lo que realmente podría marcar una diferencia en tu vida; el darte cuenta que ahora tengo mucho de lo que siempre había soñado, que el éxito está tocando a mi puerta… pero no es suficiente.

A pesar de todo lo anterior hay que seguir y quitarse las gafas empañadas por la niebla del pasado para poder encontrar de nuevo el camino, el sendero que conduzca a aquello que siempre has querido pero que siendo completamente honesto en este momento me da miedo, y es que muchas veces para poder agarrar lo que nos otorga el presente hay que soltar el pasado y eso, eso muchas veces cuesta y nos causa temor de quedarnos con nada; hay que seguir pero…”Io sopravviverò, adesso ancora come non lo so; il tempo qualche volta può aiutare a sentirse meno male”

Todo lo acontecido en las últimas semanas derivó en una destrucción de mi autoestima, en sentirme poco atractivo (tanto física como intelectualmente), he perdido un poco el empuje que tenía, la fuerza al hacer mi trabajo, el entusiasmo al salir con los amigos, la alegría que quizás algún día me caracterizó y que un muy querido amigo destacó hace ya varios años que yo siempre tenía una sonrisa sin importar lo que estuviera pasando, el impulso por salir a la calle y hacer que el mundo me volteara a ver por tener seguridad y una actitud seductora que en este momento no está.

Después de esta confesión lo que sigue es ponerse en acción, encontrar de nuevo a mi yo, dejar de preocuparme para empezar a ocuparme de mi, de las personas a mi alrededor y de un futuro incierto pero que depende en gran medida de mis anhelos y empeño en forjarlo, de tomar las oportunidades que presenta la vida y no quedarme aferrado a lo que no hay más que en mi mente mientras la vida pasa y yo sin moverme… ooook creo que ya nada más me falta comenzar a cantar: “Hoy voy a cambiar…” jajaja, bueno reír es un buen comienzo.

 
Parte del soundtrack en mi cabeza al escribir esto y creo que va mucho es "The other side" de Fey.

martes, 10 de abril de 2012

There was a boy...

Y con él una lección aprendida. Y es que es cierto que cuando dejamos suelta a la loca de la casa podemos comenzar a ver espejismos que sólo existen aquí, en nuestra cabeza.

Después de un intento de relación no fructífero como resultado de que me dejé llevar por mis propios miedos que proyecté en terceros, la cosa no paró allí y días después todo estalló dentro de mi: enojo, celos, desesperación, desconfianza… Hoy con la cabeza mucho más fría, el corazón más quieto y habiendo respirado y meditado el asunto, me doy cuenta de que si, la cagué! Así que perdón por ello, no fue mi intención.

He aprendido nuevamente a través de equivocarme y desafortunadamente lastimando a gente que quiero en demasía (aunque la verdad no me gusta usar adjetivos para eso del querer ya que creo que se quiere o no y, por otra parte, nunca se podría querer demasiado… o no a las partes involucradas en esta mi alucinación, que digo alucinación, viaje barato de ácido jejeje) que hay personas en las que puedo y debo confiar, que me quieren tanto como yo a ellos y debo respetar la relación que tenemos tanto como su privacidad; dejar a un lado cuestionamientos estúpidos provenientes de mis miedos y mejor confiar. Alguna vez ya me lo dijo mi tía, si vas a futurizar y/o imaginar cosas, que sea en positivo! Cuesta el mismo trabajo que hacerlo en negativo, con la ventaja de que no te haces daño con algo que no tienes por seguro.

Ahora me quedo con la preocupación de haber lastimado a alguien que realmente quiero, a un compañero de vuelo y, con la duda de si por mis miedos y dejarme llevar por esto que tanto critico y digo que paraliza, habré dejado pasar la oportunidad que había estado esperando toda la vida… Me queda esperar lo mejor, confiar en que mi compañero de vuelo aquí estará (quizás un poco lastimado de momento como un ave que fue apedreada con una resortera… la mía) y que esa oportunidad tarde o temprano, de una forma u otra, con una cara conocida o desconocida, llegará… aunque debo confesar que tiempo, forma y cara tengo en la mente como me gustaría que fuesen.

There was a boy…
I hope there still be a boy… the boy.

Y como nota al pie, el soundtrack que ha venido a mi mente mientras escribía esta entrada es: “Te propongo algo” de la maravillosa Zabaleta & Manzanero, y el corito “I´m sorry” cantado por Pet Shop Boys en el Confessions Tour de Madonna, recordándome que me equivoqué y que es justo pedir perdón.


lunes, 9 de abril de 2012

Nuevos olores, distintos lugares.

Pues verán, el largo silencio que había guardado estas últimas semanas de debió a que posteriormente al tan esperado cambio laboral siguió el aún más ansiado cambio que había estado esperando toda mi vida: el cambio a mi departamento!

Después de una búsqueda intensa en febrero y marzo sin tener éxito, encontraba departamentos dentro del presupuesto pero que no ofrecían lo que buscaba u otros que excedían mis requisitos y por ende el prepuesto; fue así como tuve que incrementar ligeramente el presupuesto y como por arte de magia aparecieron de nuevo en el radar opciones que yo había descartado pero que ahora también bajaban su precio haciendo intersección con mis posibilidades y gustos.

Tenía un departamento elegido en la San Miguel Chapultepec sin embrago, no terminaba de convencerme del todo y dado lo impulsivo y atrabancado que soy, decidí ir a la Condesa a revisar de nuevo un departamento que me había parecido una muy buena opción y… sorpresa! También bajó de precio aunque ya casi estaba rentado, pero como las palabras se las lleva el viento, tuve que acelerar todo para al día siguiente dejar el depósito y papeles y así quedarme con esta opción que creo fue lo mejor.

Algunos cambios fueron necesarios, el color de las puertas, pintar algunas paredes ya que tengo conflicto con el hecho de que todo esté blanco… tal vez hace que me sienta en una institución metal y la verdad no me gusta que mi hogar sea el primero en restregarme lo loco que puedo estar jajaja, un gabinete que tuvo que ser eliminado, etc. Van dos semanas y aunque quedan algunas cosas por hacer, se podría decir que ya está en condiciones bastante habitables desde hace una semana que ya llevo instalado y solo falta por recibir un sillón de la sala y comprar uno que otro adornito.

En fin, ahora las mañanas tienen otro sabor, nuevo colores, distintos olores, diferentes sonidos en lo que ahora es mi hogar.

Y así con esta noticia, doy por reiniciada la bloggeada de de este año.

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